Alfonso Azpiri fue el creador de los famosos personajes Lorna y Mot y uno de los mejores ilustradores que ha dado el comic español. Pero su amplia trayectoria le llevó también a incursionar en el campo del humor gráfico, los videojuegos o el cine. Sus ilustraciones han dado la vuelta al mundo, llegando a publicarse en numerosos paises. Te invitamos hoy a conocer mejor al autor y su obra.

(2009)
Entradas relacionadas que podrían interesarte
El autor
El ilustrador e historietista Alfonso Azpiri Mejia (Madrid 1947-2017) nació en una familia dedicada a la música y él mismo llego a recibir clases de piano y formar el parte del grupo “Doble Sentido”, pero pronto se decantó por el dibujo.
A partir de 1971 comienza la publicación para la revista Trinca de “Dos fugitivos en Malasia“, una serie de historietas basadas en una obra de Emilio Salgari. El guion fue creado por Fernando Sesény y la historia tuvo continuación a lo largo de 34 números.
Dentro de la revista Trinca publicó también otras historietas cortas a color, con la colaboración en los guiones de Carlos Saiz Cidoncha y Carlos Buiza. En 1975 apareció el album recopilatorio Alpha Cosmos Nº 27 con una selección de algunas de sus historias publicadas previamente en la revista. En esta primera etapa el arte de Alfonso Azpiri estaba influenciado por otros ilustradores de la época como Esteban Maroto, Jeff Jones, Alberto Breccia y, especialmente, Víctor de la Fuente.

La etapa italiana
Trinca cerró sus puertas en 1973 y Alfonso Azpiri recalaría, junto a Victor de la Fuente, en la editorial italiana Elvipress. Durante tres años realizó trabajos alimenticios destinados al mercado italiano, con historias que combinaban terror y erotismo. Esta etapa le sirvió para perfeccionar su estilo, donde cobran protagonismo las figuras femeninas sensuales y el humor, además de ganar experiencia en la creación de historias de amplio desarrollo.
De forma paralela desarrollaba otros trabajos más personales como Zephyd, una serie de historias de fantasía heróica, con guion de Carlos Cidoncha. Fue publicada a partir de 1978 en la mítica revista Cimoc, de la editorial Riego que recopiló la historia de Zephyd en un solo álbum monográfico en 1980. A lo largo de la serie el dibujo de Azpiri abandona la influencia de Victor de la Fuente y gana en expresividad.

Vuelta a España
En 1976, de regreso a España, Alfonso Azpiri trabajo en cinco números de la nueva revista semanal cómico-erótica Muerde, dirigida por Chiqui de la Fuente y publicada a través su propia editorial, J. F. Ediciones. También colaboró brevemente con la revista El Acordeón (Editorial Esco), realizando historietas cortas de ciencia ficción para un público juvenil.
A partir de 1977 se pasó al humor gráfico colaborando en varias revistas y como colorista de Forges en sus series sobre la historia de España.
En 1979, creó para la revista erótica Mastia, de nuevo con guion de Carlos Cidoncha, uno de sus personajes más característicos: Lorna (en un principio llamado Lorna y su robot lascivo), cuyas historias tendrían continuidad a lo largo de los años en revistas como Cimoc y Mouse Club.
Lorna es una sensual rubia (era la época del destape), científica para más señas, que se ve envuelta en aventuras enmarcadas en una ciencia-ficción con tintes humorísticos y eróticos, aunque nunca pornográficos.

La madurez creativa de Alfonso Azpiri
Los ochenta fueron una etapa frenética y de gran despliegue artístico que coinciden con un momento de plena forma y madurez creativa para Alfonso Azpiri. Continua su colaboración con Cidoncha como guionista, para crear la serie de larga duración Supervivientes del pasado publicada por la revista Delta en 1982. Sus obras también aparecen en importantes revistas como 1984, Heavy Metal o Penthouse Comix.
Azpiri y el cine
La obra de Azpiri había alcanzado ya un importante reconocimiento que, sin dejar de lado su faceta como ilustrador de historietas, le abrió nuevos campos creativos.
En 1985 incursiona en la industria del cine para realizar, junto al ilustrador argentino Juan Giménez, el diseño de los trajes para la película El Caballero del Dragón, dirigida por Fernando Colomo. Le seguiría, años más tarde, una curiosa colaboración con el gran Paul Naschy en la película de terror Rojo Sangre (2004), dirigida por Christian Molina, en la que Azpiri puso sus lápices en la creación de la cartelería y el story board.
Nuevas creaciones
A partir de abril de 1988 comienza a publicarse dentro de Pequeño País (suplemento infantil del diario El País) una serie de historietas escritas por el guionista Nacho (Ignacio Moreno Cuñat) y protagonizadas por MOT, otro de los personajes más aclamados de Alfonso Azpiri.
MOT es un ser extraterrestre con aspecto de monstruo que arrastra a mil aventuras a Leó, un tímido joven, apareciendo a través del televisor. Sus historias, mezcla de ciencia fición, humor y fantasía, se prolongaron a lo largo de ocho años en los que cosechó una enorme popularidad. Además de las periódicas historietas cortas del suplemento, Azpiri produjo otras seis historias largas, las cinco primeras publicadas incialmente por el País entre 1988 y 1993. Planeta DeAgostini reedito en 2009 la obra completa dividida en dos tomos.
En 1989 Opera Soft realizó una adaptación para un videojuego de ordenadores basado en el personaje de MOT. El mismo año L’Studio-Canal Plus Internacional produjo la serie animada, compuesta por 26 capítulos de 30 minutos.

Videojuegos
Desde 1988, Azpiri había iniciado una etapa de colaboración con varias empresas españolas del sector de los videojuegos (Dinamic, Topo, Opera Soft, Erbe). Realizó en total casi 200 ilustraciones tanto de las carátulas como de los dibujos interiores. que fueron recogidas en 2009 en un libro titulado Spectrum. Esta relación con empresas del sector fue el gérmen del mencionado videojuego de MOT (Opera 1989), el de Lorna (Topo, 1990) y el juego erótico La Colmena (Opera Soft, 1992), con diseños del propio Azpiri.

Final de siglo
Durante los 90 Alfonso Azpiri continua ilustrando historietas juveniles como la serie El bosque de Lump, publicada en Pequeño País entre 1993 y 1996. Sin embargo no abandona el género erótico. En 1994 Norma publica el álbum Reflejos, con guion de Juan Antonio de Blas. También en el mismo años trabaja en algunos números del personaje Bethlehem Steele de la revista Penthouse Comix.
La Editorial Norma, que tenía los derechos de distribución internacional de la obra de Azpiri, incia en 1998 una serie de reediciones de su obra bajo el nombre Colección Azpiri.
Ultimos años
La compilación iniciada por Norma se prolongo con nuevas hitorias de Lorna y la trilogía compuesta por El Ojo De Dart-An-Gor, Sombras Perdidas y Las Torres Negras publicado en 2005.
También en 2005, Carlos Giménez le propuso una colaboración para ilustrar unos guiones basados en tres relatos de Jack London: The red one, Lost Face y Mauki. Esta relación dió además como fruto el libro Cementerio Estelar, que fue igualmente editado el mismo año por Norma.
Además de trabajar en otras reediciones de material previo, parte del cuál era inédito, siguió con la ilustración de varios libros de aventuras.
En su última etapa participó con sus creaciones en varias películas. En 2002 publica El fantasma del Palacio, parodia de El fantasma de la Ópera para la Semana de Cine Fantástico de Málaga. Azpiri trabajó en diversos proyectos cinematográficos con sus diseños y escenarios, ilustrando carteles y haciendo los storyboards.
Galería de arte de Antonio Azpiri



















¿Te ha gustado esta entrada? Déjanos tu valoración y tu comentario.
Queremos ofrecerte el mejor contenido. Ayúdanos a seguir creando y a mejorar colaborando con nosotros en Ko-fi y obtén recompensas muy especiales.
Síguenos en redes sociales a través de Twitter e Instagram.
